miércoles, 20 de enero de 2010

Trineo de Vela para la nieve y agua




Este pequeño bote o trineo de vela tiene las ventajas de ofrecer una visión sin obstáculos, un centro de gravedad bajo, y elasticidad para amortiguar los choques producidos por las asperezas del hielo, características que lo hacen especialmente apropiado para usarlo en estanques, lagos pequeños y ríos. Desmontando el mástil, resulta suficientemente compacto cómo para poderlo transportar sobre et techo de un auto, y es tan liviano que también se puede llevar tirando de él como de un trineo común.
El chasis consta solamente de dos piezas, la tabla de apoyo del cuerpo y el travesaño para los patines. Este es una tabla curva; como indica la Fig. 1 a la que se le da dicha forma sumergiéndola en agua durante varias horas o sometiéndola a vapor de agua durante una hora o más, después de lo cual se coloca en molde hasta que se seque. La mejor madera para esta pieza es el abeto, aunque también puede usarse pino blanco seleccionado cuando no se dispone del primero. En las Figs, 1, 2 y 3 se dan detalles precisos de su construcción, que es muy sencilla. Los patines Figs. 1 y 3 son de acero, afilados en forma de "V" con el vértice en el borde inferior. La parte delantera del chasis va montada sobre un resorte en espiral, fijado según se indica en la figura inferior de la izquierda, de la Fig. 3. La parte superior del manubrio de gobierno gira en el interior de un buje hecho con caño de bronce. Los patines traseros se atornillan a bloques de madera dura, Y éstos a su vez, se fijan a los extremos del travesaño curvo. Se notará que el mástil es ahusado, Y al insertar la base en el. estribo, un pasador transversal lo mantiene en posición. Los obenques son de cable de acero de 1/8 de pulgada y van provistos de tensores. Al aparejar, no conviene tener los obenques muy tensos.



Esta precaución hace que el sotavento quede un poco flojo durante el uso, lo cual permite controlar mejor la vela y aliviar al mástil de una sobrecarga excesiva.. El mejor material para la vela es la muselina cruda, pero puede usarse cualquier tela que se tenga a mano, con tal que no sea muy pesada. Lleva unos dobladillos cosidos con hilo fuerte por donde se inserta la vela en el mástil y la botavara. Esta última se pliega contra el mástil. para recogerlo, envolviendo la vela en torno de ambos. El zuncho de la parte superior del mástil no es más que un anillo de hierro con agujeros para la inserción de armellas. Estas pueden atornillarse en el mástil, o bien, los agujeros del anillo pueden ser roscados para que las armellas se atornillen en ellos. El arbotante es un perno con cabeza de aro que atraviesa el mástil, y engancha con una armella fuerte, atornillada en el extremo anterior de la botavara. La vela se puede aparejar a la derecha o la izquierda a voluntad. El acabado de se hace en colores naturales.

 

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